:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/TQWZ47GSPVFXHF5GOUORFZM5E4.jpg "Bombeo de petróleo")
Bloomberg — El petróleo se encaminaba hacia su racha más larga de pérdidas semanales desde marzo mientras el presidente Joe Biden mantenía a los inversores adivinando si actuará para mantener a raya los precios que han ayudado a avivar un aumento de la inflación en Estados Unidos, en perjuicio de los consumidores.
El West Texas Intermediate (WTI) caía un 1,9%, poniendo al crudo en curso a su tercera baja semanal. Biden está sopesando medidas que incluyen la liberación de crudo de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR) para tratar de reducir el costo de la gasolina en las estaciones de servicio, que ha alcanzado un máximo de siete años.
Durante varias semanas, un pequeño grupo de sus principales ayudantes ha discutido posibles movimientos, según personas familiarizadas con el asunto. El consenso ha sido difícil de alcanzar, con algunos funcionarios del Departamento de Energía que se oponen a recurrir a la SPR mientras los asesores de la Casa Blanca presionan para obtener una liberación, o incluso detener las exportaciones de crudo de Estados Unidos.
El petróleo ha avanzado más este año a medida que el consumo se recupera del impacto de la pandemia, contribuyendo a la inflación de precios al consumidor más rápida en Estados Unidos en tres décadas. Si bien los precios están resintiendo la presión de la liberación de reservas a corto plazo, los contratos de opciones cambiaron de manos el jueves, lo que beneficiaría a los compradores con un aumento de hasta US$250. Enfrentando una creciente presión política para actuar, Biden está sopesando sus opciones de intervención a pesar de que la Administración de Información de Energía apuntó a saldos más débiles el próximo año.
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El desafío que enfrenta Biden sobre los costos de la gasolina es particularmente evidente en California, el estado donde los conductores generalmente pagan más por el combustible que en cualquier otro lugar de los EE. UU. Los precios minoristas ahora promedian US$4.65 por galón, solo 2 centavos por debajo del récord establecido en 2012, según Datos de AAA.
“El viento en contra está siendo generado por un dólar estadounidense significativamente más firme y la especulación sobre una liberación de reservas estratégicas de petróleo en los Estados Unidos”, dijo Carsten Fritsch, analista de Commerzbank AG. “Si la OPEP + quiere evitar un exceso de oferta, tendrá que repensar sus planes de producción para el próximo año”.
Precios:
- El WTI para entrega en diciembre cedió un 1,6% a US$ 80,28 por barril a las 8:49 am en Nueva York.
- El Brent para la liquidación en enero cayó un 1,3% a US$ 81,82 el barril.
La caída del petróleo se ha producido como un indicador de que el dólar apunta a una ganancia semanal del 1%, la mayor desde agosto, ante la preocupación de que el aumento de la inflación en Estado Unidos justifique aumentos de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Un dólar más fuerte hace que las materias primas cotizadas en la moneda sean menos atractivas para los compradores extranjeros.
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