EE.UU. autoriza dosis de refuerzo contra el Covid-19 para todos los adultos

Bloomberg — Asesores de salud pública estadounidenses recomendaron de manera unánime las dosis de refuerzo contra el Covid-19 de las vacunas desarrolladas por Moderna Inc. y la asociación de Pfizer Inc. y BioNTech SE para todos los estadounidenses mayores de 18 años, lo que hace que millones de personas más sean elegibles para recibir protección adicional mientras crece la preocupación por una posible ola de infecciones en el invierno boreal.

Los 11 asesores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) votaron a favor de las terceras dosis para las personas mayores de 18 años, apenas unas horas después de que los reguladores estadounidenses las autorizaran el viernes. El comité también votó para recomendar que las personas de 50 años o más reciban los refuerzos. La directora de los CDC, Rochelle Walensky, aún debe aprobar la recomendación del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización de la agencia antes de que comiencen las vacunaciones.

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Las vacunas de refuerzo de ARN mensajero están disponibles desde mediados de septiembre para las personas de 65 años o más, así como para otras personas que podrían tener un mayor riesgo de padecer una enfermedad grave. Según las directrices federales, los beneficiarios pueden recibir cualquiera de las tres vacunas autorizadas como refuerzo, independientemente de la vacuna inicial que hayan recibido.

Según los CDC, más de un tercio de las personas mayores totalmente vacunadas habían recibido un refuerzo hasta el jueves, y el 17% del total de adultos totalmente vacunados se han puesto una inyección adicional.

La preocupación de que la eficacia de las inoculaciones iniciales pueda desaparecer a medida que el clima se hace más frío y la gente se relaciona más en interiores ha estado detrás del impulso. Los datos presentados por Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson a los organismos reguladores de medicamentos de EE.UU. sugieren que las tres vacunas actualmente autorizadas en el país han visto disminuir su eficacia.

Pfizer pidió a la FDA que ampliara el acceso a sus dosis de refuerzo a todos los adultos a principios de este mes. La empresa y su socio BioNTech SE dijeron que los datos de un gran ensayo clínico demostraron una eficacia relativa de la vacuna del 95% para los receptores del refuerzo en comparación con los que no lo recibieron.

Moderna hizo el pedido a los organismos reguladores esta semana. Los refuerzos de Johnson & Johnson están actualmente disponibles para todos los adultos que recibieron la vacuna de una sola dosis hace al menos dos meses.

Numerosos estados, como Arkansas, California, Colorado, Kansas, Kentucky, Massachusetts y Nuevo México, así como la ciudad de Nueva York, ya han optado por ampliar el acceso a los refuerzos. En muchas de esas zonas, los casos están aumentando después de una desaceleración en la oleada de la variante delta del verano.

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Al mismo tiempo, algunos científicos afirman que las pruebas de que las vacunas están perdiendo su poder de protección son escasas y que la necesidad de refuerzos entre los grupos más sanos no está clara. A algunos también les preocupa que un uso más amplio de los refuerzos pueda socavar la confianza en la serie inicial. Además, algunos temen que permitir que los más jóvenes reciban terceras dosis de vacunas de ARN mensajero podría aumentar el riesgo de miocarditis, un efecto secundario cardíaco que se observa sobre todo en varones adolescentes.

El gobierno de Biden se ha inclinado hacia hacer que los refuerzos estén ampliamente disponibles. En agosto, la Casa Blanca prometió que las dosis suplementarias estarían disponibles antes de que los organismos reguladores las autorizaran, lo que provocó cierto rechazo por parte del personal y los expertos de la FDA.

Los CDC destacaron en octubre, tras autorizar por primera vez las dosis de refuerzo para los receptores de las vacunas de Moderna y J&J, que siguen centrados en hacer llegar las vacunas a los brazos de las personas que siguen sin vacunarse. Alrededor del 69% del total de la población estadounidense ha recibido al menos una dosis de una vacuna hasta el 18 de noviembre, según la agencia.