Crisis de Covid-19 amenaza temporada de vacaciones al desbordarse hospitales de EE.UU.

Médicos y enfermeras dicen que están agotados y frustrados; meses de campañas de vacunación no han sido suficientes.

vacunación
Por Jonathan Levin, David Welch y John Tozzi
12 de diciembre, 2021 | 06:38 PM

Bloomberg — Luego de meses de advertencias de que las vacunas evitarían una catástrofe como la del Covid-19, Estados Unidos navega hacia una crisis navideña.

Los casos y los ingresos hospitalarios están aumentando en medio de una temporada de reuniones familiares. La mayoría de las víctimas han evitado las vacunas. La situación es especialmente grave en los fríos estados del noreste, pero los médicos de muchos lugares informan de un ciclo sombríamente repetitivo de ingresos hospitalarios, cuidados intensivos y muerte. Faltan camas y personal para atender a los enfermos.

“Estamos en una situación desesperada”, afirma Brian Weis, director médico del Northwest Texas Healthcare System de Amarillo, el peor punto del estado.

En 12 estados y la capital del país, el promedio de siete días de ingresos hospitalarios con Covid-19 confirmado ha aumentado al menos un 50% con respecto a dos semanas antes, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. Las áreas con los mayores incrementos porcentuales fueron Connecticut, Nueva Jersey, Washington D.C., Vermont y Rhode Island.

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Ola de inviernodfd

Según los datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC por sus siglas en inglés), se considera que algo más del 60% de la población estadounidense está totalmente vacunada, lo que generalmente significa dos vacunas. Eso sigue dejando un gran grupo de personas altamente susceptibles capaces de presionar a los hospitales.

En los datos más recientes de los CDC, de septiembre, las personas no vacunadas tenían un riesgo 14 veces mayor de morir por Covid-19 tras un ajuste en la edad, un factor importante en los resultados de Covid-19.

Un trabajador de salud ayuda a los residentes en un lugar de vacunación contra el Covid-19 en el barrio de Chinatown de Nueva York, el domingo 5 de diciembre de 2021.dfd

En algunos estados del Medio Oeste y Noreste, las hospitalizaciones por Covid-19 están reflejando el patrón estacional del año pasado, dijo Pinar Karaca-Mandic, uno de los líderes del Proyecto de Seguimiento de Hospitalizaciones por Covid-19 de la Universidad de Minnesota.

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“Se acerca el invierno, la gente está más encerrada en casa”, dijo. Durante el aumento repentino del año pasado, “todo el mundo no estaba vacunado”, dijo Karaca-Mandic. Aunque la mayoría de los estadounidenses están vacunados ahora, también se aíslan menos que el año pasado.

Vacunas por todas partes

Las autoridades siguen promoviendo las vacunas. En Boston, la alcaldesa Michelle Wu informó que el jueves se vacunó ella misma en el Ayuntamiento. La ciudad está añadiendo clínicas de vacunación, incluso en las escuelas y las universidades de toda la región han comenzado a informar a los estudiantes de que se requerirán refuerzos. New Hampshire llevará a cabo un “Booster Blitz” el viernes en lugares de todo el estado.

Pero Karaca-Mandic dijo que el comodín es la nueva variante: “No sabemos qué pasará con ómicron”.

Mientras el mundo se ha centrado en la variante, que se propaga rápidamente pero puede no ser más mortal, los casos causados por la variante delta han seguido aumentando en EE.UU. Las olas de infecciones surgieron y retrocedieron en diferentes momentos en diferentes regiones, y los puntos calientes recientes, como Montana y Colorado, están viendo ahora una mejora.

Aún así, Colorado tenía sólo 518 camas de cuidados intensivos disponibles el jueves, dijo Scott Bookman, comandante de incidentes relacionados con Covid-19 del estado. “Tenemos un largo camino por recorrer antes de que nuestros hospitales se vacíen”, dijo en una sesión informativa.

Incluso en los lugares que se están recuperando, prevalece una sensación de premonición. California ha visto tasas de infección relativamente estables en las últimas semanas, con hospitalizaciones en torno a los niveles que había en julio, antes de que la delta se afianzara. Pero el estado más poblado tenía 11 casos confirmados de ómicron hasta el miércoles, lo que “presume que veremos docenas más en los próximos días, cientos más en las próximas semanas, miles más” después, dijo el gobernador Gavin Newsom en la televisión ABC.

En Amarillo, se han cancelado cirugías electivas y las salas de urgencias están atascadas con pacientes con virus que deben esperar hasta cinco días por una cama en el hospital, dijo Weis en una entrevista telefónica. Los responsables de los hospitales regionales han solicitado al estado personal adicional “pero hay pocas esperanzas de que puedan llegar”, dijo.

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En Connecticut, que tiene una de las tasas de vacunación más altas de EE.UU., 576 personas fueron hospitalizadas con Covid-19 hasta el 8 de diciembre; de ellas, el 77% no estaban vacunadas, según los datos estatales.

El promedio de ingresos hospitalarios diarios en Nueva Jersey alcanzó un promedio de siete días de 206, un 78% más que dos semanas antes. Aun así, en estas fechas hace un año, el ritmo de ingresos era bastante más del doble.

“La abrumadora mayoría de nuestros nuevos casos, nuevas hospitalizaciones y nuevas muertes, lamentablemente, provienen de los no vacunados”, dijo el gobernador Phil Murphy durante una sesión informativa el 8 de diciembre.

El Sistema de Salud Geisinger, que cuenta con nueve hospitales en el noreste y el centro de Pensilvania, está por encima de su capacidad y está rechazando pacientes, dijo Gerald Maloney, director médico de los servicios hospitalarios.

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“La gente está cansada”, dijo Maloney en una entrevista. “Ya es peor que hace un año, y puede empeorar aún más”.

En Nueva York, la gobernadora Kathy Hochul ordenó a más de 30 hospitales que se estaban llenando de pacientes y que detuvieran algunos procedimientos. El alcalde Bill de Blasio dijo que eso era un sombrío presagio para la ciudad de Nueva York.

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“La ciudad más grande de EE.UU., densamente poblada, no podemos dejar que eso ocurra aquí”, dijo.

Desgaste

En Michigan, los hospitales están llegando a un punto crítico. Las 22.883 camas de hospitalización del estado están ocupadas en más de un 85%, dijo John Karasinski, portavoz de la Asociación de Salud y Hospitales de Michigan.

La situación es grave y se ve agravada por varios factores”, dijo Karasinski en una entrevista telefónica. “La ola de Covid-19 está estresando a los hospitales, a su personal y a su capacidad. Hay una escasez continua de personal. Ya existía antes de la pandemia y ha empeorado durante la misma”.

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El Departamento de Defensa envió tres equipos de 22 profesionales médicos para ayudar, cada uno en una parte diferente del estado.

Illinois tenía 3.178 hospitalizaciones por Covid-19 hasta el miércoles, la cifra más alta desde enero, según el departamento de salud estatal. Seis de las 11 regiones del estado tenían 20 o menos camas de cuidados intensivos disponibles.

El fin de semana de Acción de Gracias es uno de los posibles impulsores del repunte, dijo Arien Herrmann, director del centro de coordinación hospitalaria de los condados más meridionales del estado.

“Las personas que viajan, visitan a sus amigos y familiares y se reúnen crean una oportunidad para la propagación en la comunidad”, dijo Herrmann en una entrevista telefónica. “Será lo mismo de cara a la Navidad y luego al Año Nuevo. Esta situación me quita el sueño”.

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Con la asistencia de Vincent Del Giudice, Joe Carroll, Kara Wetzel, Elizabeth Campbell y Carey Goldberg.

Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.