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Ciudad de México — Pasaron casi dos años desde que el gigante inmobiliario y de coworking, WeWork (WE) abriera su última ubicación en América Latina. La llegada del Covid-19 la llevó a pausar su crecimiento, en medio de la reconfiguración de la compañía.
Sustentada ahora bajo una alianza estratégica con Softbank, que opera en exclusiva en la región de América Latina, WeWork reactivó sus aperturas en la región con un nuevo centro en Tlajomulco, un municipio que forma parte de la zona metropolitana de Guadalajara, una de las principales del país.
Las nuevas aperturas podrían continuar este año. La reactivación del crecimiento en México dependerá de que WeWork logre superar los niveles de ocupación que mantenía previo a la llegada de la pandemia, algo que directivos de la empresa esperan que suceda en los próximos meses.
“Es cuestión de poco tiempo, una vez que esto suceda, es cuando vamos a volver a plantearnos el crecimiento y dónde seguir creciendo va a depender mucho también de dónde añadamos más valor a nuestros miembros”
dijo a Bloomberg Línea Álvaro Villar, gerente general de WeWork en México y Centroamérica
La demanda será el principal impulsor de las decisiones de ubicación de nuevas unidades en México. Hasta ahora, WeWork cuenta con 26 unidades esparcidas en los tres centros urbanos del país, Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara.
Una de las vías de crecimiento de la empresa considera su potencial expansión a ciudades secundarias, como Querétaro, Mérida, Aguascalientes, Puebla, que son centros urbanos que registran una fuerte actividad industrial y comercial, y a donde han migrado los nómadas digitales, impulsados por el trabajo flexible e híbrido.
“Es algo que está en nuestra estrategia, es algo que los miembros están pidiendo”, agregó Villar.
Crece en Centroamérica
WeWork planea la apertura de su segundo edificio en Costa Rica a mitad del año. La empresa inició operaciones en ese país con el primer centro en febrero de 2020.
La otra fuente de crecimiento de WeWork en México está en los nuevos esquemas de negocios para la atracción de clientes, así como nuevos productos, como una nueva opción de servicios bajo demanda.
La disrupción causada por la pandemia llevó a WeWork a incursionar en el segmento educativo. Tec Milenio ha rentado espacios que sirven como campus para la universidad , mientras que la Anáhuac Online, ofrece a sus estudiantes de MBA acceso a las instalaciones de WeWork para realizar sus actividades educativas.
“La industria de la educación se está reinventando por completo hacia un modelo mucho más híbrido. Todos nos vimos ante una oportunidad de reflexionar y rehacer muchos modelos de negocios y la educación no se quedó atrás”, señaló Villar.
Uno de los impulsores de este tipo de innovaciones está en la flexibilidad que tiene la empresa en la región a través de la alianza estratégica con Softbank, que entró en operación en mayo de 2021.
La alianza combina el modelo de negocio con la experiencia local del fondo, de US$5.000 millones, enfocado a América Latina, y que ha dado vigor al segmento emprendedor de la región.
“Ganamos cierta agilidad en la toma de decisiones, ganamos cierta independencia, porque Softbank como WeWork saben que hay mucho potencial en lanzar productos y en hacer crecer la región”, dijo Villar.
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